Desde Archivo Histórico Jovita, se pudo destacar parte de la historia de la localidad que fueron tendencia en su momento. El Padre Pedro Quaranta realizó un hallazgo muy importante que circuló por varios periódicos y con titulares que lo distinguían.
Palabras del Padre Pedro (año 2012): “Desde el principio de los trámites para la instalación del IPEA, un problema importante de aquel tiempo era el agua potable. La de la quinta tenía un porcentaje muy elevado de arsénico, así que hubo que buscar por otro lado. Como yo había andado bastante por los campos, pidiendo para las fiestas patronales: que gallinas, que corderos, lechones, chorizos, etc. etc. Andando y andando había descubierto
una línea de agua, que era bastante buena, junto a la ruta 27, en la estancia Don Juan, a unos 6 km de la escuela. Le digo a un hombre: “Hace una perforación aquí”, y sacamos agua y la mandamos a analizar, a Córdoba. Junto con el agua de esta perforación iba una botella con agua de la quinta, otra con agua de los aljibes y otra con agua del subsuelo de Jovita, me contestan que tomáramos el agua del molino donde habíamos hecho la perforación. Fue un hallazgo importante que hasta salió en el diario Puntal, de la ciudad de Río Cuarto. El título decía “El cura que encontró el agua.” Así fue como hicimos una cañería de unos 6 000 metros con el molino instalado que mandaba agua al tanque australiano, del colegio, y antes, a otro pequeño tanque que se llenaba y pasaba al tanque grande y ahí se surtían el internado del colegio para todo lo que necesitaran. Bueno después yo quería llevar el agua para las casitas que había hecho en la esquina de acceso Villemur y Roque Sáenz Peña, me trataron de loco. Sin embargo, cuando se habló del problema que significaba la falta de este vital elemento, entonces empezaron a buscar, y terminaron usando el agua que yo había descubierto, esa veta, esa vertiente…Y así CELJO instala la primera planta potabilizadora en el sur de Córdoba. Se instalaron como 200 o 300 bombas sacando el agua, con caños de 4 pulgadas se la lleva al pueblo donde está la planta de tratamiento, que la clora para el uso familiar y luego hay otro sistema junto, donde se estabiliza y se distribuye como agua potable, o sea, para consumo de las personas, que es la que estamos bebiendo actualmente. De manera que a cada casa llegan dos tipos de agua: una clorada y desinfectadas y el agua potable para tomar. Esto, de dos tipos de agua por red, fue innovador en ese momento, como lo fue el sistema de cañería -ideado por Atilio Calvi- que se hizo en forma subterránea sin romper calles ni veredas. De otros pueblos vinieron a consultar esta novedosa técnica”
Investigación y redacción: Archivo Histórico.
Edición periodística: Norma Torres